Este texto estaba pendiente desde hace mucho tiempo. Sailor cambió su línea de tintas hace unos meses y yo lo mencioné en mi entrada sobre el mezclador de tintas. Pero quería describir con más detalle las nuevas estrategias de esta marca. No me siento muy feliz con todo esto porque, al fin y al cabo, le doy una publicidad que no se merece cuando sube el precio de algunos productos de un modo exagerado. En fin…
Pilot es, en el mercado japonés, la marca de plumas más visible. Su línea básica Custom 74, con plumines de oro de 14 K que van desde el EF hasta el musical, está presente en el mostrador de la muchas papelerías y de las secciones correspondientes de la mayoría de los grandes almacenes de Tokyo, que es lo que yo conozco. En comparación, Platinum y Sailor eran casi invisibles.
Pero desde hace unos meses Sailor ha aumentado su presencia en las tiendas. Ahora es fácil encontrar su gama Profit 14 –la competencia directa de la Custom 74— codo con codo con su competidor de Pilot. En Occidente, la Profit 14 es la serie más barata, plumín junior de 14 K, del modelo 1911.
Otro campo de batalla es el de la tinta. Empezó con lo que parecía una cambio completo de sus tintas habituales. Así, dejaba de lado las conocidas marrón (brown), marrón rojiza (red brown), verde (green), gris (grey) y amarillo anaranjado (yellow orange) para centrarse en los tres colores serios: negro, azul negro y azul. Y además, este cambio suponía un aumento significativo de precios: de los JPY 600 a los JPY 1000 por la misma cantidad de 50 ml de tinta. Para justificar lo injustificable Sailor habla de que el tintero ahora incorpora un dispositivo que permite aprovechar mejor los restos de tinta al cargar plumas con sistemas de autollenado.
Las tres tintas tradicionales --negro, azul-negro y azul-- que han sobrevivido al cambio en las estrategias comerciales de Sailor.
Y poco más o menos en esas fechas, Sailor sacó al mercado la primera de las series de tintas estacionales, la de invierno. A día de hoy, hay tres series de ellas –invierno, primavera, verano— con cuatro tintas cada una. Estos son los colores y el significado, entre poético y jocoso, de sus nombres.
Invierno:
Shigure: lluvia suave.
Yuki-akari: luz de nieve.
Irori: hogar, en el sentido de fogón, chimenea.
Tokiwa-matsu: pino de Tokiwa, una variedad japonesa.
Primavera:
Waka-uguisu: ruiseñor joven. El uguisu es, en particular, la variedad japonesa Cettia diphone.
Sakura-mori: bosque de cerezos.
Nioi-sumire: fragancia de violetas.
Miruai: azul de pino marítimo.
Verano:
Fuji-musume: la hija de la glicinia (Wisteria floribunda). Este nombre hace referencia a un personaje del festival dedicado a las niñas el 3 de marzo.
Sôten (transliterado erróneamente como souten): azul cielo.
Doyô (transliterado como doyou): fin del verano. Doyô hace referencia a los 18 días previos al cambio de estación. El más popular es el del verano, antes del equinoccio de otoño.
Rikyû-cha: te de Rikyû. Sen Rikyû fue el creador de la ceremonia del te en el s. XVI.
Pero aún hay más. Sailor se ha mostrado muy activa a la hora de colaborar con algunas tiendas para crear tintas exclusivas para ellas. Una de ellas es la serie de la tienda Ishida Bungu en Hokuto, ciudad vecina de Hakodate, en el sur de la isla de Hokkaido.
Tintas para la tienda Ishida Bungu hechas por Sailor. La foto está sacada de la revista Shumi no Bungubako, Vol. 16, (EI Publishing Co., Ltd. 2010).
Son tres tintas:
Hakodate gagome: alga kombu de Hakodate. Color marrón verdoso.
Gotoken: hace referencia al color del curry de Hakodate en la versión de un restaurante muy tradicional. Color marrón.
Hakodate Twilight Blue (sí, en inglés): el azul del atardecer de Hakodate. Color azul oscuro.
Otras tiendas con tintas exclusivas realizdas por Sailor son Maruzen (al menos en su central de Nihonbashi en Tokyo) y Nagasawa, en Kobe.
Por su parte, las tintas permanentes, pigmentadas, han aumentado con la inclusión de un azul-negro. En precio también han subido de los antiguos JPY 1500 a los presentes JPY 2000.
Como dije en mi entrada Reflexiones, me pregunto si Sailor se merece tanto tiempo y espacio después de subir sus precios de un modo tan escandaloso. Las tintas normales han subido un 66%, y las permanentes un 33%. Y sin embargo sé que muchos estilófilos caerán en la tentación. Yo, por mi parte, me he aprovisonado de tintas viejas a precios viejos. En Japón, los comercios son honestos y no suben el precio de las antiguas por el hecho de que las nuevas sean más caras. Alguna ventaja tenía que tener vivir aquí.
(Todos los precios reseñados aquí son los reseñados en el catálogo de Sailor. Son precios en yenes, JPY, y sin IVA, un 5 %).
Bruno Taut
(Inagi, 7-8 de julio de 2010)
[labels: Sailor, Pilot, Platinum, Japón, tinta, estilofilia, Shumi no Bungubako]